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¿Cómo mejorar la tasa de conversión a través del diseño web?

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La tasa de conversión, ese concepto que trae de cabeza a las empresas cuando ponen en marcha campañas para potenciar ventas o contrataciones. Es lo que determina la eficacia de una estrategia, porque al final determina la cantidad de personas que han llegado a hacer la compra o realizar la conversión deseada (sea un registro de cuenta, visualizar un contenido o cualquier otra cosa). 

En torno a ella se construye todo un castillo de ideas, de elementos pensados para aumentar su valor y dar más fortaleza al negocio. Pero nada de eso sirve si no se parte de lo esencial, un buen diseño. Porque, sí, el diseño web puede aumentar el CRO de tus campañas siempre y cuando sepas cómo hacerlo.

Como aumentar el CRO de tu página: la clave del diseño web profesional

Lo que vamos a contarte es algo que dominan los grandes especialistas del diseño de páginas web. Equipos como el de Latevaweb, agencia de diseño web especializada en crear y remodelar portales online a medida de sus clientes, conocen de sobra el arte de invitar al clic, de fomentar la conversión de los usuarios que tanto persiguen todas las empresas. Porque, con una buena distribución de elementos, un buen uso del color y un mensaje claro y conciso, se pueden hacer auténticas maravillas.

Ahora bien, ¿qué pasos hay que seguir exactamente para mejorar el CRO de una campaña a través del diseño web? Como ocurre con el diseño en general, aquí la clave es contar sin hacerlo de forma explícita o, si se hace, desarrollarlo de manera que realmente consiga conectar con el usuario para que este siga el camino que se desea. Es como dejar un rastro de migas de pan en el que se intercalan pepitas de chocolate que van atrayendo todavía más la atención.

Pero no vamos a poner más ejemplos. Vamos a ir al grano. A continuación tienes varias claves y consejos para que tu tasa de conversión se multiplique con tan solo plantear un buen diseño web. La diferencia puede ser descomunal y, en ocasiones, lo único que hay que hacer es retocar ciertos matices. Así de caprichosa es la mente del ser humano:

Investiga la psicología del color

Los colores cuentan muchísimo. Por eso mismo, hay que saber cuáles escoger y dónde utilizarlos en base a lo que quieras hacer. No te pierdas en una gama de colores repleta de tonos diferentes, porque entonces solo consigues una sensación heterogénea que hace al usuario sentirse en mitad de la nada. Busca siempre un color principal para destacar aquello que te interese y uno secundario que contraste para acompañar. No hace falta nada más.

Puedes usar una misma familia de colores, aprovechar las escalas de grises o usar colores complementarios para conseguir los contrastes. Piensa en la imagen de marca y elabora a partir de ahí.

La limpieza lo es todo

Un diseño saturado y repleto de cosas que no aportan nada solo va a conseguir que el usuario se marche y tenga una fuerte sensación de rechazo. Míralo de esta forma: ¿te perderías antes en una llanura o en un bosque muy frondoso? Esto, trasladado al diseño web, es lo mismo que hablar de introducir pocos elementos visuales o muchos. Pero no siempre es mejor, y mucho menos cuando hablamos de diseño de páginas web.

Tienes que buscar la forma de aportar mucho más enseñando mucho menos. Dicho así suena complicado, y lo cierto es que lo es, pero también es cierto que quienes lo dominan consiguen que sus conversiones crezcan mucho más. Busquen lo que busquen con ellas.

Deja clara la jerarquía de cabeceras

Sabrás de sobra que en tu web debe haber diferentes headings (h1, h2, h3, etcétera). Estas cabeceras, además de ayudar a distribuir el contenido y dejar clara su jerarquía, también son esenciales para el buen posicionamiento web a través del SEO. Ahora bien, si de verdad quieres que funcionen a la hora de mejorar tu CRO, tienes que asegurarte de que hay diferencias claras entre ellas.

De nada sirven un H2 y un H3 que son casi iguales en tamaño y grosor de la letra, y lo mismo podemos decir del H1 y el H2. Haz que las diferencias sean claras, porque así se consigue que el lenguaje visual remarque qué es lo prioritario y qué surge de este. Te ayuda a construir mejor el discurso y a guiar al usuario por tu web hacia donde quieres.

Una landing, una llamada a la acción

Todo aquel que haya ido alguna vez a un bufé libre sabe lo complicado que es decidirse por algo cuando hay tantas opciones entre las que escoger. Lo mismo se puede decir del diseño web y las llamadas a la acción. Si quieres que tus conversiones aumenten, tienes que hacer que haya una sola CTA (Call to Action o Llamada a la Acción) en la landing a la que lleves al usuario.

Así irá directo, siempre y cuando hayas sabido conducirlo bien. Si das otra opción ya generas duda, y la duda es letal para el CRO.

Una imagen vale más que mil palabras

Guárdate ese popular dicho en la cabeza, pero quédate mejor con esta versión: una imagen potente vale más que mil conversiones. Las imágenes que acompañen en la landing deben ser explicativas y, sobre todo, seductoras. Deben mostrar el resultado, no el proceso, a la vez que apelan a las emociones y juegan con los colores vivos y encuadres diferentes a lo habitual.

La originalidad llama la atención, y eso es justo lo que se busca a la hora de conseguir que la CTA funcione. Eso sí, aunque quieras contrastes que cautiven la mirada, recuerda que los colores deben componer una armonía con la web.

Como decíamos, el diseño web es todo un arte, sobre todo el enfocado a la venta o a la conversión. Hay que dominar un lenguaje que pocos conocen, pero que entra directo a la cabeza de las personas. Si quieres saber más sobre este intrigante e interesante campo, puedes echar un vistazo a este artículo de la wikipedia.

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